Nombre completo
Antigua, Pontificia y Franciscana Hermandad y Cofradia de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fundación y Nuestra Señora de los Ángeles.
Dia de procesión
Jueves Santo
Templo
Capilla de Nuestra Señora de los Ángeles en la calle Recaredo. El Templo actual se inauguró en 1965, pues la original desparecio en el siglo XVII.
Recorrido
El recorrido de La Hermandad de Los Negritos para este año 2010 es el siguiente:
15.00. – Recaredo – 15.22. Puñonrostro – 15.30. Puerta Osario – 15.36. Escuelas Pias – 15.55. Plaza Padre Jerónimo de Córdoba – 15.58. Plaza Ponce de León – 16.00. Juan de Mesa – 16.05. Almirante Apodaca – 16.15. Plaza de San Pedro – 16.19. Imagen – 16.30. Plaza de la Encarnación – 16.40. Laraña – 16.45. Plaza de Villasís – 16.50. Orfila – 17.00. Javier Lasso de la Vega – 17.10. Trajano – 17.15. Plaza Duque de la Victoria – 17.30. Campana – 18.10. Plaza San Francisco – 18.40. Catedral – 19.05. Placentines – 19.10. Alemanes – 19.20. Conteros – 19.25. Argote de Molina – 19.35. Placentines – 19.45. Francos – 20.10. Cuesta del Rosario – 20.25. Angel Mª Camacho – 20.35. Plaza de la Alfalfa – 20.55. Águilas – 21.25. Plaza Pilatos – 21.30. San Esteban – 21.55. Puerta Carmona – 22.00. Navarros – 22.20. Guadalupe – 22.40. Recaredo – 22.45. Entrada a Templo
Musica
Capilla musical en el Cristo, y tras el paso de palio Banda de la Esperanza de Triana
Tunica
Las túnicas de Los Negritos son blancas de cola, con escapularios y cíngulos celestes.
Historia
En la zona de extramuros, dando frente a la Puerta Carmona, se encontraba el hospital denominado en un principio de Nuestra Señora de los Ángeles y luego de los Reyes. Los llevaban los de raza negra, procedentes de África, los más esclavos, y allí los atendían de sus dolencias y enfermedades.
Por otro lado, en la iglesia de San Antón Abad, había erigida una cofradía de negros, con reglas aprobadas en 1554, que se titulaba Honra y Gloria del Omnipotente Dios y la Soberana Virgen de Nuestra Señora de la Piedad. Poco tiempo se mantendría con vida, ya que en el traslado de los cuerpos reales y la imagen de Nuestra Señora de los Reyes, en 1579, entre las veintiséis hermandades de penitencia que figuraron no se encontraba ésta.
Estos cofrades negros llegarían a unirse con los del hospital, y serían los que en 1604 recibirían la cesión de tres solares pertenecientes a Juan de Vargas Sotomayor, situados frente a la parroquia de San Roque, para erigir la capilla que se ha mantenido.
Ocurrió un enojoso pleito en 1606 con la Hermandad de la Antigua y Siete Dolores, en la que estos pedían que se prohibiese la salida a los negros. Se fundaban en los escándalos que producían las acusaciones de que pedían limosna por las calles sin licencia alguna. Dichas peticiones las ganaría la cofradía de San Pablo el Real, dictándose sentencia de condena, especialmente de sus oficiales, de pena de excomunión mayor y la percepción de cien azotes para cada una uno de ellos. A pesar de su notificación la cofradía hizo la estación. Tuvieron que forzar la puerta Carmona para entrar al centro. Asimismo, por Real Provisión del Consejo de Castilla, de 1614, se prohibía igualmente realizar a la hermandad su procesión de penitencia, por las burlas que de ello se hacía y por lo que hurtaban a sus amos para comprar la cera.
Tras el fallecimiento del cardenal Niño de Guevara, que prohibió la procesión, y para evitar que se repitiesen los anteriores pleitos, la hermandad acudió a la Santa Sede y obtuvo la aprobación de sus reglas en 1625. Es la única cofradía que las posee directamente de Roma.
Notable cofrades negros han dado gloria a la hermandad. Entre ellos, Domingo de Molina y Pedro Fernández Moreno, quienes en el año 1618 vendieron su libertad para festejar a su Patrona, la Virgen de los Ángeles, en desagravio de los ultrajes proferidos sobre el misterio de la Concepción Inmaculada. Esta venta con esclavos se llevó a cabo en la calle Catalanes, en cuyo recuerdo allí se colocó una Cruz, llamada del Negro, mantenida hasta 1854.
La cofradía daba culto al Cristo de la Fundación, que talló Andrés de Ocampo, en 1622, y a una Dolorosa de autor anónimo. Hasta 1848 no entraron cofrades blancos como hermanos, debido a que ya quedaban pocos de raza negra. A finales de XIX eran sólo cuatro por lo que perdió su carácter racial.