Sevilla se prepara para un 2025 histórico. A la intensidad emocional y espiritual de su Semana Santa se le sumará un calendario repleto de procesiones extraordinarias, con más de 30 salidas de imágenes, entre ellas dos eventos que quedarán marcados en los anales de la ciudad: la visita del Cristo del Cachorro a Roma y la coronación canónica de la Virgen del Rocío de la Hermandad de la Redención.
Un calendario extraordinario fuera de lo común
No es habitual que Sevilla acoja tantas procesiones extraordinarias fuera de los días grandes de Semana Santa. Pero 2025 no será un año cualquiera. Hermandades de todos los distritos han programado cultos externos, salidas procesionales y traslados solemnes que elevarán el pulso cofrade desde enero hasta diciembre.
Se estima que habrá más de 30 salidas que, sin formar parte del calendario oficial, movilizarán miles de fieles y visitantes, convirtiendo calles, plazas y parroquias en escenarios vivos de devoción y arte efímero.
El Cachorro a Roma: una devoción que cruza fronteras
Uno de los momentos más esperados será la histórica salida del Cristo del Cachorro hacia Roma. Será la primera vez que esta icónica imagen crucifique su geografía simbólica del barrio de Triana para llevar su mensaje al corazón de la cristiandad.
El impacto será inmenso: una de las devociones más intensas de Andalucía marchará a la capital italiana para representar no solo a Sevilla, sino al conjunto de la religiosidad popular andaluza. La logística será titánica: desde el transporte de una talla con siglos de historia hasta la organización de cultos, peregrinaciones y encuentros en la Ciudad Eterna.
Este gesto no es solo simbólico: es una declaración de intenciones, una manera de abrir la espiritualidad sevillana al mundo, en un año donde la conexión entre lo local y lo universal parece más intensa que nunca.
La coronación canónica de la Virgen del Rocío: redención y gloria
Otro de los hitos será la coronación canónica de la Virgen del Rocío de la Hermandad de la Redención. Una distinción que no se otorga a la ligera: solo imágenes con una sólida tradición devocional, vida parroquial activa y un profundo arraigo social reciben este reconocimiento eclesiástico.
El acto de coronación está previsto para el mes de julio, y vendrá precedido de una intensa agenda de misas, peregrinaciones, actos culturales y una magna procesión que recorrerá buena parte del centro histórico. Será un evento de ciudad, de esos que paralizan el tráfico, pero aceleran el alma.
La Sevilla que no descansa
¿Hay riesgo de saturación devocional? Esa es la crítica soterrada que algunos formulan: que tantos cultos externos puedan diluir el carácter excepcional de las procesiones extraordinarias. Pero la realidad muestra lo contrario: Sevilla no se cansa de expresar su fe en la calle.
Más aún, la ciudad parece vivir un renacimiento cofrade. El número de jóvenes que se vinculan a las hermandades crece, los barrios recuperan su orgullo procesional, y el turismo religioso sigue en alza. La ciudad ha encontrado en su patrimonio inmaterial una fuente inagotable de cohesión, identidad y belleza.
Un 2025 para recordar
El 2025 será un año para marcar en rojo en el calendario cofrade. Con más de 30 procesiones extraordinarias, Sevilla no solo multiplicará su liturgia callejera, sino que volverá a demostrar que su religiosidad no se encierra en los templos ni se limita a siete días de primavera.
Es un testimonio continuo, palpitante, popular y profundo. Una fe que camina, literalmente, por sus calles.